Pleito entre Kika Nieto y 'Las Igualadas' lo definirá la Corte Constitucional
El conflicto judicial se dio por diferencias en temas de género.
La Corte Constitucional tiene en el primer orden del día de la sala plena, la tutela interpuesta por la famosa influenciadora Kika Nieto, contra el canal de YouTube ‘Las Igualadas’, espacio de opinión del diario El Espectador, por diferencias en temas de género.
Ese tribunal ha recibido varios conceptos que sustentarían que el espacio de opinión del diario, estaría amparado bajo el derecho a la libertad de expresión. Uno de esos conceptos, es el de la organización Dejusticia. que aseguró que ni El Espectador, ni Las Igualadas, vulneraron el derecho al buen nombre de la youtuber Kika Nieto, con la publicación del video “Kika Nieto odia a gays y lesbianas así diga lo contrario”.
Esa organización planteó que el video es una columna de opinión en el ejercicio de la libertad de expresión y agregó que esa video-columna no puede restringirse a pesar de qué pueda ser “chocante u ofensiva”.
Otra de las razones de Dejustica, es que “teniendo en cuenta que la accionante Kika Nieto es una figura pública con más de 6 millones de seguidores en Youtube, el ámbito de protección de su derecho al buen nombre es más reducido y por lo tanto, debe ceder ante el derecho a la libertad de expresión de los accionados”.
Cabe mencionar que la influenciadora Kika Nieto señaló que el diario El Espectador y la periodista Mariángela Urbina (quien aparece en la video - columna), habían vulnerado sus derechos a la intimidad, la honra y el buen nombre.
En la grabación se cuestiona la postura de Nieto sobre las parejas del mismo sexo y se indica que las declaraciones de la youtuber, podrían promover el odio y la violencia.
La tutela fue negada en primera instancia por un juez de Bogotá, bajo el argumento de que el video de ‘Las Igualadas’, no incluía “expresiones que tuvieran por objeto ofender” a la youtuber o “tergiversar sus opiniones".
El juez señaló en su decisión, que la periodista en “ningún momento la acusó directamente de homofóbica o incitadora a la violencia, con las personas que tienen inclinaciones diferentes a las heterosexuales”.
Según explicó en ese momento el funcionario judicial, lo que hizo Urbina fue “un llamado de atención para no emplear frases como ‘lo tolero’ o ‘si alguien en algún punto de la vida tiene que juzgarte a ti por ser lesbiana o por ser gay, no soy yo, es Dios’, ya que las mismas pueden (…) desencadenar eventualmente, que alimenten discursos de odio”.