Yahir Acuña y el 'Gordo' García, ¿una alianza non sancta?
Ambos, que antes vivían enfrentados, sellaron un pacto solo con fines electorales en Sucre.
“La política es dinámica”. Así lo dijo en su momento el entonces ministro uribista Sabas Pretelt de la Vega, quien quiso ejemplificar así las volteretas que en algunos casos se cometen en política en Colombia. Y así parece haber sucedido en Sucre, donde se gestó una –para muchos– insólita alianza: Yahir Acuña y Álvaro García, conocido como el ‘Gordo’ García Romero.
Aunque los dos vivían enfrentados, en el actual proceso electoral que está en marcha las cosas cambiaron radicalmente. Acuña y García sellaron un pacto electoral que pocos esperaban en este departamento de la Costa Caribe.
Ahora, ambos de la mano, esperan lograr quedarse con la gobernación de Sucre, cargo al que aspira actualmente Yahir Acuña, un excongresista que ha estado inmerso en varios escándalos.
La génesis de ese pacto electoral es el malestar del clan García con Cambio Radical, partido al que pertenece Teresita García y el que le negó el aval para la gobernación al otorgárselo a Eduardo Pérez.
Ante esa crisis en la relación de los García con los dirigentes de Cambio, el ‘Gordo’ decidió patear el tablero electoral en Sucre e irse con su viejo contradictor que también tiene varias investigaciones en marcha.
En los mentideros políticos se habla que a Acuña no le quedó para nada fácil lograr convencer a García que le diera su guiño para los comicios de este domingo. Sin embargo, luego de varios lances, el excongresista alcanzó esa ‘bendición’.
Un pasado turbio
Como era de esperarse, en el departamento se habla de cómo esa bien podría ser considerada una relación non sancta. Primero porque el ‘Gordo’ García Romero fue condenado a 40 años de prisión por desviar dineros públicos para la conformación de grupos paramilitares y por su injerencia directa en la masacre de Macayepo, donde 15 personas fueron asesinadas.
En el caso de Acuña ha estado salpicado por varios escándalos en su vida pública. Su origen da cuenta de una relación con Salvador Araña, condenado por nexos con paramilitares. Además, hace cuatro años, a pocas horas de las elecciones regionales, fue descubierto con $500 millones de dinero mientras su esposa era candidata en Sucre.