Por qué oler un carro nuevo podría ser peligroso para la salud
Aunque el olor a carro nuevo es agradable, expertos advierten algunos riesgos.
Al adquirir un automóvil nuevo, uno de los aspectos más intrigantes es su característico y singular aroma, el cual suele perdurar por un breve período de tiempo, pero que muchos conductores disfrutan mientras manejan.
Sin embargo, este agradable olor que complace a miles de conductores puede resultar perjudicial para la salud, ya que contiene algunas sustancias que pueden provocar diversas reacciones en el organismo, desde dolores de cabeza hasta enfermedades graves, como el cáncer.
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Un estudio publicado en la revista Cell Reports Physical Science, que investigó la "variabilidad de los compuestos volátiles en el habitáculo de un vehículo", ha concluido que exponerse a estos aromas podría aumentar el riesgo de cáncer.
El informe señala que el olor característico de un coche nuevo contiene compuestos orgánicos volátiles (COV) que, cuando están expuestos a altas temperaturas, pueden convertirse en gases y emitir vapores que contienen diversos productos químicos, entre los que se encuentran el benceno, el cloruro de vinilo, el acetaldehído y la acetona.
De acuerdo con la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), estos compuestos se clasifican en la categoría 1.
El estudio también revela que en el formaldehído se ha encontrado en concentraciones que superan en un 35 % las normas de seguridad en China. Además, el acetaldehído, catalogado como un probable carcinógeno de clase 2, se identificó en niveles que exceden en un 61 % los límites de seguridad. Por último, el benceno, conocido por su presencia en productos como pinturas, gasolina y cigarrillos, se ha registrado en cantidades preocupantes, especialmente para quienes pasan largos períodos de tiempo en vehículos.
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Jeff Gearhart, director de investigación del Centro de Ecología de Míchigan, EE.UU., comentó que se trata de un "cóctel químico formado por una gran cantidad de toxinas". Los posibles síntomas derivados de esta exposición incluyen dolor de garganta, dolor de cabeza, irritación ocular, reacciones alérgicas, fatiga, náuseas y falta de concentración.
Estos vapores suelen liberarse cuando el automóvil está expuesto a altas temperaturas, por lo que se recomienda evitar dejarlo estacionado bajo el sol y, al conducir, abrir las ventanas para ventilar el carro y minimizar la exposición a estos compuestos perjudiciales.