Cerró querido restaurante que fue referente en su tipo en Bogotá; ofrecía plato nada fácil de conseguir
Restaurantes japoneses hay muchos en Bogotá, pero no todos se precian de haber ofrecido tan buenos onigiris como este.

No parece ser un buen momento para las medianas y pequeñas empresas en Colombia y el mundo. Si las grandes corporaciones experimentan dificultades para mantenerse a flote, lo que sufren las pequeñas resulta peor.
Prueba de ello son los múltiples casos de heladerías, pizzerías, cafeterías y varios tipos de emprendimientos que se han visto forzados a cerrar en los últimos meses debido a diferentes circunstancias, pero con un factor común en las dificultades financieras.
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Uno de las que recientemente también anunció su cierre es Onigiri, restaurante ubicado en el corazón de Chapinero, en Bogotá, reconocido por ofrecer justamente onigiris: platos de arroz muy populares en Japón, pero no tan fáciles de replicar con el mismo toque original.
Al quedar en una zona de oficinas y universidades, era punto de encuentro común para todo tipo de personas a la hora del almuerzo. Todas ellas le hicieron un nombre y se convirtió en referente en su tipo en la capital, por lo que sus seguidores recibieron con tristeza el anuncio de su cierre, a principios de abril: "Decidimos cerrar este capítulo por motivos personales, con la convicción de que a veces es necesario hacer una pausa para poder crecer de verdad", anunciaron.
"Este sueño nació en nuestra casa, desde cero, con nuestras propias manos, y durante estos tres años ha sido una experiencia inolvidable. Nos ha enseñado más de lo que imaginamos, y nos ha permitido conocer personas que nos han cambiado la vida", continúa la misiva, que concluye agradeciendo a sus clientes y colaboradores.
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Valeria, una de sus creadoras, publicó un video en sus redes confirmando la mala noticia, compungida por tener que dar el anuncio. Sin embargo, dejó una luz que ilusiona a los amantes de sus comidas: "No es un cierre completo, porque la idea es crecer y ojalá lograr un proyecto aún más grande", dijo.
Aunque fueron solo 3 años de existencia, fueron intensos y lograron acumular más de 11.000 seguidores en Instagram, los cuales reflejan el éxito de su producto y la marca que deja en ella y su pareja, Mario Cruz, con quien levantó el lugar y lo convirtió en "exitoso de todas las maneras".
"Se va a venir algo mejor y va a crecer a algo mucho más grande", concluyó.