Alto comisionado de la ONU para DD.HH. rechazó asesinato de líderes sociales
El delegado del organismo señaló que la impunidad en estos casos favorece a los violentos.
La propagación de ataques en contra de personas que ejercen la defensa de Derechos Humanos, es un síntoma grave del estado de cosas en Colombia, según lo señaló, a través de un comunicado, Alberto Brunori, alto comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas en Colombia.
En el escrito, el delegado destacó que los recientes asesinatos de líderes y defensores de Derechos Humanos en el país, demuestras intolerancia, provocan miedo, limitan o anulan las libertades de pensamiento y de expresión, y, lo que es peor, exhibe cómo la violencia se impone, en muchos lugares, como un medio de control social.
Brunori también hizo un llamado al esclarecimiento de estos asesinatos, pues señaló que la impunidad que ronda estos ataques agrava la situación, puesto que, ante la ausencia de sanción oficial, el reproche social se reduce y la violencia encuentra justificación.
Cabe mencionar que el Estado anunció la implementación de nuevos esquemas colectivos de protección ante el incremento de los homicidios de los voceros comunales que, de acuerdo con las más recientes cifras, solo este año han llegado a 73 casos.