Cuatro soldados muertos tras combates en el Bajo Cauca antioqueño
Los enfrentamientos entre la Fuerza Pública y el 'clan del Golfo' también dejaron ocho heridos.
Combates entre el Ejército Nacional y el ‘Clan del Golfo’ dejaron cuatro soldados muertos y ocho heridos en hechos que se registraron entre los municipios de Tarazá y Cáceres, Bajo Cauca antioqueño. uno de los militares estaría desaparecido.
Los soldados lesionados fueron trasladados hasta el Hospital de Caucasia.
Según información oficial, unos 25 militares del Batallón Rifles se desplazaron hasta la zona para verificar una información aportada por la comunidad, que manifestaba la presencia de integrantes del ‘Clan del Golfo’.
En el sitio fueron sorprendidos por aproximadamente 40 hombres, que portaban armamento largo, lo que desencadenó el combate.
El general Juan Carlos Ramírez Trujillo, comandante de la Séptima División del Ejército Nacional, se desplazó hasta la zona para coordinar los operativos de búsqueda de los responsables del ataque.
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Confinamiento
De otro lado, en los municipios de Dabeiba, Frontino, Urrao y Murindó, al menos mil familias están confinadas en sus territorios por temor a quedar en medio del fuego cruzado, como consecuencia del recrudecimiento de combates entre grupos armados.
Cerca de 500 niños están desescolarizados por amenazas de muerte y reclutamiento, mientras la población teme salir de los resguardos para llegar hasta sus escuelas.
El consejero de Justicia la Organización Indígena de Antioquia (OIA), Richard Sierra, confirmó que esas regiones antioqueñas se han convertido en corredores estratégicos de los grupos al margen de la ley, situación que mantiene en riesgo a las comunidades indígenas por la siembra de minas, reclutamiento forzado y confinamiento en sus viviendas.
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"Se han presentado este tipo de confrontaciones entre grupos ilegales y hoy más de mil familias indígenas sufren confinamiento en sus territorios, tienen miedo de movilizarse, hay minas antipersonales que se han sembrado en la región. Hay 500 estudiantes, todos menores de edad, desescolarizados", dijo.
En esas comunidades Embera Eyábida ya escasean los alimentos, los indígenas no pueden acceder a sus cultivos de pancoger por los constantes ataques armados por parte de los ilegales. El consejero Richard Sierra reiteró que tampoco pueden llevarles comida o ayudas humanitarias porque los actores armados no lo permiten.
"Este tipo de actores controlan el ingreso de alimentos a los territorios, advirtiendo que son usados para entregárselos a los grupos armados (lo que no es cierto) y se convierten en una situación preocupante que atenta contra la vida de las comunidades", expresó.