Encapuchado muerto por 'papa bomba' pertenecería a grupo radical, según Policía
Gobernación de Antioquia dijo que el joven, al parecer, escondía explosivos en la Universidad.
Julián Andrés Orrego Álvarez, el joven estudiante de la Universidad de Antioquia que murió tras la explosión de una ‘papa bomba’ en las afueras de ese claustro académico, supuestamente pertenecería al grupo clandestino Jaime Bateman Cayón, de las desmovilizadas Farc.
Así lo aseguró el comandante de la Policía Metropolitana de la capital antioqueña, general Eliécer Camacho Jiménez, quien señaló que pese a que este grupo de jóvenes con capuchas, overoles, camisetas blancas y pañoletas rojas trataron de ocultar su identidad, uno de ellos quedó identificado.
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"Ellos mismos lo están vinculando a ese grupo, lamentaron la pérdida de la vida de él, pero que siguen con la lucha con sus actividades vandálicas. En ningún momento dicen que se apenan o lamentan lo que sucedió sino que, según ellos, está bien hecho lo que están haciendo. Ellos reconocen que pertenecía al grupo Jaime Bateman Cayón".
El gobernador de Antioquia, Luis Pérez Gutiérrez, aseguró que en la Universidad de Antioquia estarían guardando los explosivos con los que intimidan a los ciudadanos. Entre tanto, solicitó al rector Jhon Jairo Arboleda que investigue con contundencia qué es lo que está pasando.
"La muerte de un joven de 20 años, estudiante de la Universidad de Antioquia, lo que tiene que llevar a reflexionar al rector de la universidad y a sus directivas porque lo que se está viendo es que dentro del claustro están guardando explosivos, armamentos y elementos para causar este tipo de desórdenes", dijo.
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Los hechos que le costaron la vida al estudiante ocurrieron en la calle Barranquilla, justo a la afueras del claustro universitario. La Policía adelanta las investigaciones para determinar de dónde provenían los explosivos.
Las directivas de la Universidad de Antioquia lamentaron la muerte trágica del estudiante y expresaron su voz de solidaridad con la familia, compañeros y amigos del joven.
“Reiteramos nuestro llamado a que la universidad sea entendida, defendida y vivida como un territorio de paz, a que propiciemos en ella espacios plurales de discusión de potentes propuestas en beneficio de las transformaciones que necesita el país”, dice uno de los apartes del comunicado de la rectoría.