Gobierno Petro pide reunión extraordinaria por captura del expresidente de Ecuador Jorge Glas

La Cancillería de Colombia solicitó formalmente a Honduras, presidencia pro tempore de la CELAC, convocar una reunión extraordinaria para abordar el caso de la captura del exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, a quien el Gobierno mexicano le había concedió asilo. 

Según el Ministerio de Relaciones Exteriores colombiano, este hecho está relacionado con una ruptura de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.

"El Gobierno de la República de Colombia expresa su enérgica condena a la violación de las normas de la Convención de Viena de 1961 sobre Relaciones Diplomáticas, base de las relaciones entre estados, ocurrida con la incursión de las fuerzas de seguridad de Ecuador en la Embajada de México en Quito", expresó la Cancillería. 

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De igual manera, Colombia solicitará a través de las instancias del sistema interamericano de Derechos Humanos medidas cautelares para proteger al exvicepresidente de Ecuador, Jorge Glas Espinel, quien se encontraba en la sede de la Embajada de México.

"Las sedes de las misiones diplomáticas son santuarios en donde los países anfitriones no tienen jurisdicción, por lo que hechos como el ocurrido anoche en Quito son una clara violación de la soberanía de México", detalló la entidad.
 
Sin embargo, el país está presta a propiciar espacios de diálogo que contribuyan a superar las diferencias entre países hermanos y ser garante de paz en la región.

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Cabe mencionar que por lo anterior, México suspendió las relaciones diplomáticas con el Gobierno de Ecuador, según ordenó el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador. 

“Me acaba de informar Alicia Bárcena, nuestra secretaria de Relaciones Exteriores, que policías de Ecuador entraron por la fuerza a nuestra embajada y se llevaron detenido al exvicepresidente de ese país quien se encontraba refugiado y tramitando asilo por la persecución y el acoso que enfrenta”, informó a través de su cuenta en X. 

Además, el presidente de México pronunció que este acto se trató de una violación flagrante al derecho internacional y a la soberanía de México.