ONU insiste en la urgencia de implementar el Acuerdo de Paz por persistencia de la violencia en Colombia
Informe de la ONU alerta sobre la violencia y los desafíos en el proceso de paz en Colombia

En su reciente informe ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el Secretario General António Guterres resaltó la persistente violencia en la región del Catatumbo, subrayando los factores estructurales que siguen alimentando el conflicto en Colombia, entre ellos, la limitada presencia del Estado y el crecimiento de economías ilegales, especialmente los cultivos ilícitos.
Guterres indicó que esta situación ha renovado la necesidad urgente de acelerar la implementación del Acuerdo de Paz firmado en 2016.
Además, se destacaron ciertos avances en el proceso de reincorporación de los excombatientes de las Farc-EP, más de 9.000 armas fueron entregadas para su destrucción y cerca de 12,000 exguerrilleros, incluidos 27% de mujeres, participaron activamente en el proceso de reincorporación.
Le puede interesar: JEP acepta emitir una única sentencia para cada uno de los exjefes de las Farc, pero con una condición
Sin embargo, la Reforma Rural Integral, por ejemplo, aún no ha alcanzado sus metas, con solo un 6% de las 3 millones de hectáreas de tierra prometidas adjudicadas a la fecha. Los programas de sustitución de cultivos ilícitos tampoco han tenido el éxito esperado, debido a la falta de seguimiento y apoyo por parte del Estado.
Guterres abordó la grave situación de violencia que afecta a excombatientes y líderes sociales. Desde la firma del Acuerdo de Paz, 460 excombatientes han sido asesinados, incluyendo 11 mujeres y un número significativo de indígenas y afrocolombianos.
En el último trimestre, 40 defensores de derechos humanos fueron asesinados, lo que refleja la continua vulnerabilidad de estas comunidades. El Secretario General urgió al Gobierno colombiano a implementar las garantías de seguridad del acuerdo, que tienen como objetivo proteger a las comunidades rurales y a los excombatientes.
En cuanto a la justicia transicional, el informe resaltó la importancia de avanzar con rapidez en la emisión de sanciones por parte de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). También se mencionó el retraso en la implementación del Capítulo Étnico del Acuerdo, que busca corregir las desigualdades históricas sufridas por los pueblos indígenas y afrocolombianos.
Guterres concluyó su informe destacando la complejidad y no linealidad del proceso de paz en Colombia, solicitando al Gobierno y a la sociedad a mantener el compromiso con la implementación del acuerdo, vital para consolidar una paz sostenible en el país.