Se cumplió proceso de demolición de edificio Mónaco, fortín de Pablo Escobar
Las autoridades van a hacer en el lugar un parque en homenaje a las víctimas del capo del Cartel de Medellín.
El edificio Mónaco, antiguo fortín del fallecido capo Pablo Escobar, pasó a ser finalmente derribado este viernes por la alcaldía de Medellín para construir un parque dedicado a las víctimas del narcotraficante. "El edificio Mónaco cae. No se trata de borrar la historia, es empezar a contarla en honor a nuestros verdaderos héroes: las víctimas", indicó la alcaldía de Medellín.
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Los ocho pisos del ostentoso búnker que protegió alguna vez al jefe del cártel de Medellín y a su familia cayó a las 11:50 en un hecho abierto al público.
En el lugar, casi en ruinas luego de ser un monumento al lujo y la extravagancia, se construirá un espacio conmemorativo de 5.000 metros cuadrados en honor a los miles de ciudadanos que perdieron la vida durante la época más cruenta del llamado "narcoterrorismo", como se conoce a la guerra sin tregua de los cárteles contra el Estado en los años 80 y 90.
La iniciativa es parte de una campaña de la alcaldía de Medellín, que Escobar convirtió en su teatro de operaciones, para contar otra parte de la historia que no siempre registran las series de televisión o los recorridos turísticos en los que el edificio es parada obligatoria.
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Todos los días grupos de curiosos visitan el fortín blanco que construyó el narco en los 80 en El Poblado, uno de los barrios más exclusivos de Medellín. Aunque hoy está desocupado, durante años fue utilizado por diversas entidades, entre ellas la policía.
Escobar fue uno de los hombres más ricos del mundo, según Forbes, tras fundar un imperio del crimen y el terror. Murió a manos de la policía en 1993.
Memoria en disputa
Como parte de la iniciativa gubernamental, desde 2018 extranjeros y locales que participan en los "narcotours" se encontraron con un edificio recubierto de carteles que recordaban a esos otros "protagonistas" que la alcaldía se ha empeñado en resaltar: policías, periodistas, civiles o jueces asesinados por orden del capo.
"Respeta nuestro dolor, honra nuestras víctimas (1983-1994). 46.612 vidas menos", rezaba uno de los avisos que cayó junto con la estructura 25 años después de la muerte del capo.
El Mónaco es también referente del primer coche bomba detonado en Colombia. En 1988, el cártel de Cali atacó la estructura, con Escobar y su familia adentro. La explosión afectó el oído de la hija del capo y desató una sangrienta guerra entre cárteles.
El atentado también hirió el ego del narcotraficante, pues los explosivos afectaron sus valiosas colecciones de carros y arte.
Como parte de esa lucha por borrar la huella del capo, a finales de enero fue retirada de la Hacienda Nápoles la réplica de la avioneta en la que transportó su primer cargamento de cocaína a Estados Unidos. Ubicada en el noroeste del país, la extensa finca opera hoy como un parque recreativo.
Pese a la caída de Escobar y otros grandes capos, Colombia tristemente sigue siendo el principal productor de cocaína y Estados Unidos el mayor consumidor de esa droga.