Veedurías piden investigar fugas de detenidos de los calabozos de la Fiscalía en Cartagena
La solicitud enviada al Fiscal General, Néstor Humberto Martínez, pretende poner freno a esas inconsistencias en la detención de los capturados.
La Veeduría de la Rama Judicial de Cartagena le pidió al fiscal general de la Nación, Néstor Humberto Martínez, designar un equipo especial para que investigue las recientes fugas de detenidos de los calabozos de la Fiscalía seccional Bolívar, con sede en Cartagena.
Erick Urueta Benavides, presidente de este colectivo, consideró necesaria una actuación urgente por parte del ente investigador.
Urueta Benavides señaló que situaciones que se registraron el 5 de diciembre del 2016 y este 4 de julio de 2017 en las instalaciones de las Fiscalía, ubicadas en el barrio Crespo, requieren una atención inmediata del fiscal Néstor Humberto Martínez, así como una verificación de los protocolos de seguridad
“Le hemos dicho al señor fiscal que nombre un equipo interdisciplinario que se encargue de abrir las investigaciones en contra de los funcionarios que eran o que son los responsables de mantenerla seguridad en dichas instalaciones y además de verificar el cumplimiento de los protocolos y políticas de seguridad de la entidad”, apuntó Urueta.
La solicitud enviada al fiscal general pretende poner freno a esas inconsistencias en la detención de los capturados. “Si cada siete meses se nos van a estar fugando las personas detenidas en la Fiscalía, entonces que la Fiscalía avise para que se de un carnaval de fugas en la entidad”.-Caso reciente-
Durante la madrugada del martes se fugaron tres detenidos de las calabozos de la Fiscalía de Cartagena, dos eran custodiados por la Policía y uno por el CTI. Los capturados están identificados como Wilfrido Polo Guerrero y Eder Luis Morales, ambos sindicados por hurto, y Yesid Santos Gómez por porte ilegal ilegal.
La hipótesis de las autoridades señala que, al parecer, uno de los prófugos salió de las instalaciones de la Fiscalía forzando el candado de la celda donde se encontraban vigilados por miembros de la Policía, el CTI y la Infantería de Marina, quienes solo se percataron que no estaban al momento de iniciar su trasladado a la cárcel de San Sebastián Ternera.
-Fiscalía no da explicaciones-
Tras la fuga del 5 de diciembre de 2016, Urueta Benavides reiteró que fue presentada una solicitud a la fiscal seccional, Ángela Bedoya Vargas, a quién le pidieron que diera a conocer qué tipo de actuaciones penales, administrativas o disciplinarias, había presentado por esa eventualidad. Un oficio de 9 de diciembre, que según la veeduría no fue respondido.