La historia de Gayle Laverne Grinds, una mujer que murió tras 6 años sentada en un sofá
La mujer estadounidense pesaba cerca de 215 kilos con tan solo 40 años.
Eran cerca de las 8:40 pm de un 10 de agosto, cuando en Florida (EE.UU.) diferentes servicios de emergencias recibieron la llamada de un joven que pedía ayuda para su hermana que se encontraba con dificultades respiratorias.
La mujer, Gayle Laverne Grinds de 40 años, estaba postrada en un sofá cuando los trabajadores acudieron al lugar. Tras un tiempo, se dieron cuenta que la mujer se encontraba ‘pegada’ al asiento del cual no se había levantado hace seis años.
Esta trágica historia ocurrió en 2004, cuando Grinds perdió la vida tras varias horas de intentos, de los servicios médicos y bomberos, por salvarle la vida.
¿Cómo sucedió el hecho?
Todo comenzó cuando Gayle Laverne tenía 34 años, edad en la que su peso inició un aumento descontrolado, pues con tan solo 1.48 metros de altura, alcanzó un total de 480 libras (peso en el que falleció), lo que corresponde a 215 kilos.
De acuerdo con la información que suministraron algunos medios locales, la mujer permaneció sentada en el sofá en sus últimos seis años de vida, hecho que generó una adhesión de la piel a la tela.
Según Herman Thomas, hombre que vivía con Grinds, trató en diferentes ocasiones de ayudarla a levantar, pero esto le costaba demasiado dolor a la mujer. “Traté de cuidarla lo mejor que pude, pero no sirvió de nada. … Desearía haberla levantado del sofá, pero no me dejó”, comentó Thomas a los periodistas de The Sun.
Obesidad mórbida, causa de muerte oficial
Tras largas horas de intentos para despegar a la mujer del sofá, los trabajadores de emergencias decidieron llevarla con todo y el asiento al hospital, pese a haber creado una camilla lo suficientemente grande, para separarla de manera quirúrgica.
Pese a los esfuerzos realizados, la mujer perdió la vida a las tres de la mañana del 11 de agosto, en el hospital donde se le atribuyó la muerte a su obesidad mórbida.
Sin embargo, las autoridades investigaron al hermano y la familia de Gayle por negligencia, pues sospechaban que la mujer estaba en condición de abandono.
De acuerdo a los últimos informes, no se hallaron pruebas para corroborar la hipótesis de la policía de negligencia familiar.