El papa dice que, antes de juzgar, es mejor callarse
El papa Francisco afirmó que la Iglesia Católica es la "casa paterna donde hay un lugar para todos" y defendió que, antes de juzgar a nadie, es mejor "cerrar la boca".
"Nuestro juez es el Señor y, si te viene a la boca una palabra para juzgar a alguien, cierra la boca. El señor nos ha dado un consejo: 'No juzguéis y no seréis juzgados'. Hay que convivir con la gente con simplicidad y acoger a todos", afirmó el pontífice durante un encuentro con miembros de las Células Parroquiales de Evangelización en el Vaticano.
En su discurso, Francisco subrayó la necesidad de "acoger a todos sin juzgar a nadie para ofrecer la experiencia de la presencia de Dios y del amor fraternal".
"La evangelización siente fuerte la exigencia de acoger, porque es una de las primeras señales de la comunión que somos llamados a testimoniar por haber encontrado a Cristo en nuestra vida", aseguró.
"La Iglesia es la casa paterna donde hay un lugar para todos: para todos. Y Jesús dice, también el Evangelio: 'Llamad a todos, buenos y malos, a todos", concluyó el papa.