Noruega restringe vacuna de AstraZeneca y mantienen suspensión a la de J&J
En el caso de la de J&J dijo que es necesario tener más información sobre la vacuna y sus efectos antes de tomar una decisión definitiva.
El Gobierno noruego eliminó este miércoles de forma definitiva de su programa oficial la vacuna contra la covid-19 de AstraZeneca por los casos anómalos de trombosis detectados y anunció que mantendrá suspendida la de Johnson & Johnson (J&J).
La primera ministra noruega, Erna Solberg, apeló a la buena situación epidémica de coronavirus y a que haya disponibles otras vacunas suficientes (Pfizer y Moderna) para justificar la exclusión de la de AstraZeneca. Descartó además que se pueda recibir de forma voluntaria.
En el caso de la de J&J señaló que es necesario tener más información sobre la vacuna y sus efectos antes de tomar una decisión definitiva y abrió la posibilidad de establecer un sistema voluntario una vez se aclaren esas cuestiones.
"El Gobierno ha decidido que la vacuna de AstraZeneca no sea usada en Noruega, tampoco de forma voluntaria. Los raros pero graves efectos que hemos visto en Noruega muestran que el riesgo no compensa el beneficio", afirmó Solberg.
Tanto el Instituto de Salud Pública (FHI) como una comisión de expertos creada posteriormente por el Gobierno recomendaron eliminar ambas vacunas del programa oficial, aunque mientras el primero se opone a que puedan ser recibidas de forma voluntaria, la segunda sí es partidaria de un sistema de ese tipo.
Dinamarca eliminó ambas vacunas
Noruega se suma así a Dinamarca, que eliminó hace un mes de su programa oficial la vacuna de AstraZeneca y hace una semana la de Johnson & Johnson, por los mismos motivos, aunque las autoridades danesas permitirán que sea administrada a quienes así lo deseen.
Ambos países fueron los primeros en suspender de forma temporal a mediados de marzo la fórmula de AstraZeneca y elaboraron un estudio conjunto basado en sus registros sanitarios y los casos detectados que apunta a que el riesgo de contraer esos síntomas anómalos para quienes han recibido la vacuna es de 1 entre 40.000.
Solberg señaló que Noruega, que forma parte del Espacio Económico Europeo (EEE) pero no de la Unión Europea, estudiará ahora qué hacer con las dosis sobrantes de AstraZeneca y se abrió a la posibilidad de que puedan ser distribuidas en países pobres a través del Mecanismo COVAX de la Alianza Mundial para las Vacunas (GAVI).
Durante su comparecencia, la primera ministra reveló además otros cambios en el programa de vacunación, que implicarán que los municipios más afectados reciban un 60 % más de dosis y que el grupo de 18 a 25 años sea priorizado debido a que es uno de los que más contribuyen a propagar el contagio y a su movilidad.
Noruega es uno de los países menos afectados en Europa por la pandemia, con 117.494 casos y 774 muertos, con una tasa de 14,4 fallecidos por 100.000 habitantes.