¿Por qué no habría una declaración conjunta en Cumbre del G7?
La próxima cumbre se llevará a cabo el 24 de agosto.
La división en el G7 sobre el comercio, el cambio climático y la crisis iraní hace poco probable que la cumbre de Biarritz (Francia) termine con la tradicional declaración conjunta, informaron este martes medios japoneses a partir de fuentes gubernamentales.
Las delegaciones de los siete países más desarrollados (Francia, Estados Unidos, Japón, Alemania, Reino Unido, Italia y Canadá) ya trabajan en alternativas ante la imposibilidad de cerrar un borrador del texto de conclusiones para la cumbre que se celebrará del 24 al 26 de agosto, según recoge la cadena estatal nipona NHK.
Una de las opciones sobre la mesa es que los líderes se limiten a intervenir en los habituales debates sobre los temas en agenda y adopten documentos sobre puntos específicos como la igualdad o las ayudas al desarrollo, señalaron fuentes gubernamentales japonesas al diario Sankei.
Las mismas fuentes explicaron que las principales diferencias que obstaculizan la declaración final se mantienen en la defensa del libre comercio, la lucha contra el cambio climático y cómo abordar la crisis iraní, precisamente algunas las prioridades fijadas por la presidencia francesa para la cumbre.
Si la cumbre termina sin una declaración conjunta, sería la primera vez desde que los países del grupo de los siete comenzaron a celebrar reuniones anuales en este formato en 1975.
Las divergencias dentro del grupo de los siete ya quedaron de manifiesto en la cumbre del G20 celebrada a finales de junio en Osaka (Japón), una reunión que se saldó con una vaga declaración sobre los asuntos prioritarios después de largas deliberaciones.
La oposición sobre todo del presidente estadounidense, Donald Trump, impidió que el comunicado final incluyera un mensaje contundente contra el proteccionismo y que se respaldaran objetivos más ambiciosos en la lucha contra el cambio climático, como pretendía la presidencia nipona.