Alias 'Lobo Feroz' aceptó cargos por abuso sexual de menores
Sánchez Latorre tiene 276 casos que le vinculan a procesos judiciales tanto en Bogotá como en Barranquilla.
Ante el juzgado 60 de Garantías, Juan Carlos Sánchez Latorre, alias 'Lobo Feroz', aceptó los cargos que le imputó la Fiscalía General de la Nación durante la diligencia que se cumplió este viernes.
Sánchez Latorre, quien fue deportado el pasado jueves desde Venezuela, tendrá que responder ante la justicia colombiana por los delitos de acceso carnal abusivo con menor de 14 años y actos sexuales con menor de 14 años.
Este viernes 'Lobo feroz' llegó al complejo Judicial de Paloquemao acompañado de aproximadamente quince policías que lo escoltaban durante el recorrido por el lugar. Por solicitud de la Fiscalía, el juez ordenó que la audiencia se realizara a puerta cerrada ya que las víctimas son menores de edad.
Sánchez fue capturado hace diez meses en Maracaibo y fue entregado el pasado lunes en la Cárcel Rodeo II por parte de autoridades venezolanas a autoridades colombianas.
La vicefiscal General de la Nación, María Paulina Riveros, indicó que este hombre “al parecer utilizaba la sala de juegos de los centros comerciales, ubicados en la ciudad de Barranquilla, para abordar mediante engaños a las víctimas menores de edad y les ofrecía dinero con el fin de realizar actos sexuales, videos y fotografías de contenido pornográfico”.
Por su parte, el general Jorge Luis Vargas, director de la Dijín de la Policía, detalló que las autoridades identificaron el modus operandi de ‘Lobo Feroz’ -como era conocido en las redes de pedofilia- y ya se conocen quiénes eran los clientes que compraban estos productos con contenido pornográfico.
“Lo que sabemos es que actuaba solo, de ahí lo del ‘lobo’ que era como solitario, pero sí lo compartía con un grupo en la red”, explicó.
Uno de ellos estaba situado en México y a partir del seguimiento que le hacían las autoridades en el estado de Jalisco es que se logra dar con esa macabra alianza y conexión.
Sánchez Latorre, según las pruebas recolectadas, vendía estos productos entre $5.000 y los $20.000.
“Con los elementos de pornografía que él mismo recolectaba los vendía entre 200 y 400 dólares en la red”, sostuvo.