Caso Mauricio Orjuela, una cadena de errores médicos que le llevaron a la muerte

Los errores según la Procuraduría 

E.S.E. Hospital de Engativá 

Según la Procuraduría no contaron con los suministros que permitieran hacer el examen de imagenología (TAC), para prestar un servicio oportuno. 

Para el 11 de julio, fecha que se ordenó un TAC al paciente Orjuela Bernal, el hospital no tendría contratado un proveedor ni contaba con los medios suficientes para realizar el examen. Dicho proveedor estuvo vigente hasta el hasta el 10 de julio de 2018. 

El cuerpo médico no habría seguido las guías de manejo para la atención en el servicio de urgencias.  

El hospital suministró al periodista un medicamento que “enmascaró” el dolor y “volvió confuso el cuadro clínico y posiblemente contribuyó al deterioro de su salud” 

Para la Procuraduría, el hospital retrasó el diagnóstico de salud de Orjuela y el procedimiento para la intervención quirúrgica que requería el paciente, la cual se realizó tres días después de su ingreso y sin que le hubieran practicado el TAC. 

Clínica General de la 100 S.A.S 

La clínica Shaio identificó en Orjuela una obstrucción abdominal con necesidad de una interconsulta de gastroenterología y lo remitió a la Clínica General de la 100 S.A.S.  el 7 de agosto.  

Sin embargo, al parecer dicho diagnóstico fue omitido y fue dado de alta dos días después.  

El 13 de agosto Orjuela ingresa nuevamente a la Clínica General de la 100 por urgencias, pero tampoco es atendido por un especialista.  

Para la Procuraduría la clínica habría incumplido la calidad de la atención en salud, frente a la oportunidad, acceso, pertinencia, continuidad y seguridad prestados a Mauricio Orjuela. 

Señala que a pesar de que la clínica cuenta con una cobertura de gastroenterología en el Registro Especial de Prestadores de Servicios de Salud – REPS, omitió el acceso a los servicios médicos.  

De acuerdo con las pruebas, el paciente no habría sido visto por un especialista de la IPS, lo que demoró su cirugía, siendo esta una de las posibles causas del shock séptico, que finalmente terminó en su deceso. 

Medimás EPS 

Medimás EPS presuntamente incumplió con la evaluación, seguimiento y mejoramiento de los procesos de atención de salud prestado al paciente.  

Dice la Procuraduría que tampoco adelantó acciones de vigilancia sobre la red contratada, “lo que habría conllevado a una posible falta de garantías en el acceso, seguridad, oportunidad, pertinencia y continuidad del servicio”.  

La EPS no habría activado los procedimientos de verificación frente a la prestación de los servicios integrales, llevando a dilaciones en él servicios que incidieron en la muerte del periodista. 

Para el ente de control es necesario que se indague sobre el funcionamiento de la Entidad Asesora de Gestión Administrativa y Técnica – EAGAT, y la gestión fiscal que ha adelantado hasta la fecha, pues al parecer habría omitido sus deberes y funciones al no asesorar al Hospital de Engativá en temas de suministros y no tener al día los soportes que permitieran adelantar actividades contractuales para la prestación de servicios.