Embajador en Washington niega tensión diplomática con EE.UU. por situación en Gaza

El embajador de Colombia en Estados Unidos, Daniel García, afirmó que las relaciones entre Colombia y Estados Unidos son saludables, a pesar de las diferencias que puedan surgir en algunos temas como el conflicto entre Israel y Palestina. Dijo que "no se puede confundir una posición firme, con lo que hace Netanyahu con el antisemitismo”.

Según García, la relación bilateral se basa en la sinceridad y la posibilidad de expresar puntos de vista distintos, lo cual fortalece los lazos entre ambos países. 

Le puede interesar: Petro arremete contra la embajada de EE.UU. por conflicto en Gaza

En el marco de la reciente tensión generada por declaraciones sobre la situación en Israel, García subrayó que el presidente Gustavo Petro fue enfático en señalar que una postura crítica frente a las acciones del gobierno de Benjamín Netanyahu no debe confundirse con antisemitismo.

"Ni el presidente Petro ni el pueblo colombiano somos antisemitas, tenemos un profundo respeto por el pueblo judío", aseguró el embajador. Además, recordó que este es un debate que también se está dando en Estados Unidos, haciendo referencia a declaraciones del senador Chuck Schumer, quien, a pesar de ser crítico con Netanyahu, no fue tildado de antisemita.

García destacó que el hecho de que haya diferencias en temas específicos no significa que la relación entre Colombia y Estados Unidos se vea afectada. "Una relación saludable no implica que todos estemos de acuerdo siempre, sino que haya espacio para expresar desacuerdos de manera franca y respetuosa", afirmó.

Lea también: Gustavo Petro comparó a Donald Trump con Hitler

En este sentido, el embajador consideró que el intercambio de opiniones, incluso a través de plataformas como Twitter, es parte de la dinámica natural entre gobiernos que tienen una relación madura y basada en el respeto mutuo.

El embajador reiteró que las críticas de Petro al gobierno de Netanyahu están relacionadas con preocupaciones legítimas sobre el derecho internacional humanitario y los derechos humanos, y no deben ser malinterpretadas como un ataque contra el pueblo judío. "Una cosa es ser firme frente a las acciones del gobierno de Netanyahu, y otra muy distinta es ser antisemita", puntualizó.

Finalmente, García concluyó que más allá de las diferencias que puedan surgir, lo importante es que estas se discutan de manera transparente y directa, lo que refuerza la confianza entre los dos países. "Es saludable que se expresen de manera franca las discrepancias en una relación que se construye sobre la base del respeto y la cooperación", concluyó.