El impresionante cambio del hígado al dejar de tomar alcohol; ¿en cuánto tiempo hace efecto?
Estos son los otros órganos vitales que se benefician con el bajo consumo de alcohol.
Muchas personas, que llegan a ser adictas al alcohol, buscan la manera de dejar de tomar no solo por mejorar sus hábitos, sino también con el objetivo de mantener una salud óptima siempre. Un órgano vital que se beneficia significativamente al evitar el exceso regular de sustancias alcohólicas es el hígado.
El profesor Ashwin Dhanda, especialista en hígado y docente en la Universidad de Plymouth, ha abordado los notables beneficios de abstenerse de la ingesta de alcohol en un artículo publicado en The Conversation.
Puede leer: Los efectos del alcohol en el cuerpo humano: Una mirada detallada
Dhanda destaca que el hígado, el órgano interno más grande del cuerpo humano, desempeña un papel esencial en numerosos procesos corporales, incluida la descomposición de toxinas como el alcohol. Además, al ser el primer órgano en entrar en contacto con el alcohol ingerido, es el más susceptible a sus efectos, aunque el especialista aclara que otros órganos, como el cerebro y el corazón, pueden sufrir consecuencias por el consumo excesivo a largo plazo.
El profesor, quien trata a diario a pacientes con enfermedades hepáticas vinculadas al alcohol, señala que estas afecciones varían desde la acumulación de grasa en el hígado hasta la formación de cicatrices, conocida como cirrosis. Lo preocupante es que, en general, estas enfermedades no presentan síntomas hasta que el daño está avanzado.
Le puede interesar: Revelan los riesgos de mezclar sandía con alcohol: Una peligrosa combinación
A pesar de los efectos adversos, abandonar el consumo excesivo de alcohol conlleva beneficios notables. En el caso del hígado graso, por ejemplo, apenas dos o tres semanas de abstinencia permiten que el órgano se recupere, sanando y recuperando su apariencia y función original.
Para aquellos con inflamación hepática o cicatrices leves, los beneficios son aún más rápidos. Según el profesor Dhanda, una reducción notable de la grasa, inflamación y cicatrices hepáticas se observa en tan solo siete días de abstención. Sin embargo, la completa curación y restauración del hígado requieren meses de abstención total de alcohol.