A la cárcel hombre que decapitó a mujer de la tercera edad en Medellín
Sin pudor alguno el joven confesó el macabro asesinato.
Rubén Darío Atehortúa Sánchez fue enviado a la cárcel, como presunto responsable del homicidio de Beatriz Omaira Cano Arango, de 60 años de edad, quien le dio posada en su hogar en el barrio Granizal de Medellín, después de que su familia, al parecer, lo echó de la casa por su adicción a las drogas y el alcohol.
Los hechos ocurrieron el pasado sábado 8 de junio, cuando una amiga de Beatriz Omaira la buscó durante todo el día y no pudo comunicarse con ella. Ante la ausencia, fue a su casa y encontró a Atehortúa Sánchez escuchando música a alto volumen, y este le dijo que ella no estaba.
Lea también: Mujer agredida por su pareja no podría volver a caminar
A las 9:30 de la noche, habitantes del sector fueron de nuevo a la vivienda de Cano Arango. Allí encontraron a Rubén Darío, quien negó la presencia de la señora en el inmueble y luego se fue.
El coronel Iván Santamaría, comandante operativo de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, manifestó que el cuerpo de la adulta mayor fue encontrado por sus familiares, quienes preocupados por ella porque no atendía las llamadas tumbaron la puerta de la habitación.
El cuerpo estaba debajo de la cama envuelto en cobijas, la cabeza en una caneca de basura y el cuchillo utilizado para el atroz asesinato, fue hallado por los uniformados, en un armario de la vivienda.
Cerca al lugar del crimen, vecinos de Beatriz Omaira Cano Arango, alcanzaron a Rubén Darío Atehortúa Sánchez e intentaron lesionarlo, pero los agentes de la Policía lo llevaron hasta una estación policial donde hicieron efectiva su captura.
Le puede interesar: 'Jesús Santrich' se compromete a comparecer ante la justicia
El detenido manifestó voluntariamente a los uniformados que había cometido el homicidio, porque Beatriz Omaira no le suministraba comida y le faltaba al respeto, informó el comandante operativo de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, coronel Iván Santamaría.
Pese a esta declaración, en las audiencias preliminares, el procesado, quien no tenía ningún tipo de parentesco con la víctima, negó su autoría en los hechos, pero el Juzgado 18 Penal Municipal de Medellín, con funciones de control de garantías, le impuso medida de aseguramiento en centro carcelario.