Tripulantes de helicóptero que fueron liberados por el ELN están bien, dicen sus familias
Afirman que aún no se han encontrado con sus parientes, pero que se encuentran con buen estado anímico.
Familiares de Carlos Quiceno y Julio Díaz, tripulantes del helicóptero que el ELN derribó en el Catatumbo, quienes fueron liberados tras estar retenidos desde el pasado 11 de enero, hablaron en RCN Radio; agradecieron a todos por las oraciones, dijeron que sus parientes están en buen estado anímico y aseguraron que esperan reencontrarse pronto.
William Quiceno, padre de Carlos Quiceno, relató que pudo hablar con su hijo por un momento y que él le aseguró que se encontraba en libertad y que se sentía bien.
"Me saludó, me dijo: papá estoy libre, estoy en la Defensoría del Pueblo y más tarde hablarmos. Lo quiero mucho. Eso fue lo que me dijo", relató el padre de Quiceno.
William Quiceno aseguró que nunca intentaron hacer gestiones para liberar a sus familiares, pero sí pidieron que se les respetara la vida y la libertad. "Lo que rogábamos por medios de comunicación era que nos cumplieran, que se les respetara la vida y que nos los devolvieran que los queríamos en casa libres".
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De igual forma. Quiceno afirmó que en su hogar vivieron momentos difíciles y de incertidumbre por lo que no pudieron preparar nada para recibir a Carlos. El hombre también afirmó que planeaban realizar una ceremonia religiosa con familiares, amigos y allegados para pedir por la liberación de los tripulantes del helicóptero.
Finalmente, el hombre aseguró que el secuestro de estas personas fue un duro golpe para las familias, junto al atentado ocurrido en la escuela de la Policía General Santander en Bogotá. Había la sensación de que situación podría ser complicada.
"Sale el presidente a rechazar la situación y a romper el diálogo con ellos (Eln), fue uno de los golpes más certeros después del secuestro", comentó William Quiceno.
Por su parte, Liliana Prada, esposa de Julio Díaz, dijo que tras conocer que ya no estaba secuestrado recibió un mensaje donde él le aseguraba que estaba bien y con buen ánimo. "Están muy bien. Decir en este momento que sé exactamente como está de salud, no sé. Pero anímicamente sí y esta feliz, agradecido con todos".
Agradeció a las personas que acompañaron a las tres familias y aseguró que, como creyentes, la fe los ayudó. "Muchísima gente nos colaboró haciendo cadenas de oración desde muchas partes. Nos aportaron una oración, un apoyo de muchas formas. Como yo alguna vez dije, unidos somos más. La fe nos sostuvo en estos momentos", puntualizó.