Investigadores revelan la mejor hora para acostarse a dormir
Acostarse en esta franja reduce las posibilidades de desarrollar enfermedades cardiacas.
Dormir es una de las actividades que pueden mejorar o desmejorar el estado de salud de las personas.
La falta o exceso de descanso está relacionada con problemas cardiacos, cansancio en exceso y sobre todo con agotamiento corporal. Por eso, un estudio publicado en European Heart Journal - Digital Health ha revelado la hora perfecta para evitar desarrollar problemas cardiacos.
"El cuerpo tiene un reloj interno de 24 horas, llamado ritmo circadiano, que ayuda a regular el funcionamiento físico y mental", expresó David Plans, autor del estudio.
Según el estudio, la mejor hora para acostarse a descansar es de 10 a 11 de la noche, hora en la que pues disminuye las posibilidades de tener una enfermedad cardiovascular. En el mismo estudio también se revela que el acostarse más temprano aumenta el 25% de probabilidades, mientras que acostarse entre 11 a 12 de la noche puede aumentar el riesgo en un 12%.
El estudio incluyó a 88.026 personas en el Reino Unido reclutadas entre 2006 y 2010 con edad promedio fue de 61 años (rango 37 a 73 años) y el 58% eran mujeres. Los datos sobre el inicio del sueño y la hora de despertarse se recopilaron durante siete días utilizando un acelerómetro de muñeca.
"Si bien no podemos concluir la causalidad de nuestro estudio, los resultados sugieren que es más probable que la hora de acostarse temprano o tarde altere el reloj corporal, con consecuencias adversas para la salud cardiovascular", agregó.
Entre los diagnósticos a los que le dieron seguimiento los investigadores se encontraron enfermedades cardiovasculares como: ataques cardiacos, insuficiencia cardíaca, isquemias crónicas, entre otros.
Los científicos tuvieron en cuenta para este estudio elementos diversos como el nivel socioeconómico, la edad, el sexo, índice de masa corporal, entre otros. Datos que actualmente no son suficientes para concluir una causa directa, según comenta Plans. No obstante, indican que es un buen inicio para investigaciones posteriores.
“Si nuestros hallazgos se confirman en otros estudios, las horas para dormir y una higiene básica del sueño podrían ser un objetivo de salud pública muy barata para reducir el riesgo de enfermedades cardíacas”, concluyó.