Noruega, Alemania y Dinamarca cierran embajadas en Afganistán
Los países argumentan la decisión en el avance de los talibanes y el empeoramiento de la seguridad en ese país.
Al menos tres países cerraron temporalmente sus embajadas en Afganistán, tras la escalada de conflicto armado provocado por los talibanes que buscan tomarse las principales ciudades de ese país.
En el caso de Noruega, ese país informó que cerrará temporalmente su embajada en Afganistán y evacuará a todo su personal, tanto los diplomáticos como los empleados locales y sus familias.
La medida se suma a la adoptada por Dinamarca y otros países europeos, ante el avance de los talibanes y el empeoramiento de la seguridad en ese país.
Por su parte, Alemania anunció que reducirá "a mínimos absolutos" el personal de su embajada en Kabul, que seguirá sin embargo "operativa", según indicó el ministro de Asuntos Exteriores, Heiko Maas.
"Reduciremos nuestro personal en la embajada alemana en Kabul en los próximos días al mínimo absolutamente necesario", indicó en un breve comunicado Heiko Maas, después de que Estados Unidos y Reino Unido hicieran anuncios similares
Tanto Oslo como Copenhague y Berlín, han apremiado a sus nacionales a abandonar cuanto antes Afganistán.
El pasado mes de junio, Alemania completó la retirada de sus tropas en Afganistán, que formaban el segundo mayor contingente internacional en ese país, tras Estados Unidos.
En su última etapa, estaban destacados unos 1.100 efectivos alemanes principalmente en el norte del país.
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, advirtió este viernes a los talibanes de que la comunidad internacional no les reconocerá "si toman Afganistán por la fuerza" y reiteró su apoyo al Gobierno del país, donde confirmó la Alianza mantendrá una presencia diplomática que ajustará cuando sea necesario.
"Los talibanes necesitan entender que no serán reconocidos por la comunidad internacional si toman el país por la fuerza. Seguimos comprometidos con una solución política al conflicto", señaló Stoltenberg en un comunicado.