Por un problema en el traje de un astronauta, la NASA suspendió las caminatas espaciales
Durante las caminatas, los astronautas realizan tareas de inspección y mantenimiento de la nave.
Las caminatas espaciales son realizadas desde el año 1965, cuando el estadounidense Ed White fue el primer hombre en salir al espacio y controlar su movimiento, desde ese momento se ha convertido en algo común en la Estación Espacial Internacional (con sus siglas en inglés ISS). Pero en los últimos meses un problema con un astronauta puso en duda esta práctica.
Durante las caminatas, los astronautas realizan tareas de inspección y mantenimiento de la nave, así como también, realizar experimentos científicos sobre cómo el espacio puede afectar la materia llevada desde la tierra.
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Debido a un incidente que ocurrió el pasado 23 de marzo, en medio de una caminata espacial por fuera la ISS, la NASA decidió detener sus operaciones por fuera de la estación. Durante la misión se encontraban dos astronautas, el estadounidense Raja Chari y el alemán Matthias Maurer, siendo este último quien sufrió un percance, el cual fue reportado al final de la tarea.
Al terminar la actividad que duro aproximadamente 8 horas, Maurer, detectó que en su visor había una capa de agua, de 20 a 25 centímetros de ancho.
Aunque esto no se consideró un hecho que podría ser peligroso, la NASA decidió detener todas las misiones que se iban a realizar en las semanas siguientes al suceso.
En medio de una reunión, Susan Helms, quien fue una antigua astronauta del programa espacial norteamericano, y ahora forma parte de la organización, comentó que “debido a que la NASA está pensando en la postura de riesgo para estos trajes, que están envejeciendo, la Unidad de Movilidad Extra vehicular actualmente no acepta las caminatas espaciales planificadas, en espera de una investigación sobre lo que descubren”.
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En medio de las investigaciones, se determinó que el casco estuvo llenó hasta un 50%, esto se produjo por un fallo en las almohadillas que se ubican en la parte inferior, las cuales no lograron evitar que ocurra la filtración.
En el año 2013, ocurrió un suceso similar en el que el astronauta italiano Luca Parmitano, tuvo una filtración de agua en su casco, en esta ocasión se encontró aproximadamente un litro y medio, lo que supuso un riesgo para su vida, ya que había tenido problemas para respirar.