Primer trasplante de cara y manos le da una segunda oportunidad de vida a un hombre

El mundo de la ciencia y la medicina celebran un gran logro luego de que se realizara con éxito un trasplante, en simultáneo, de cara y de ambas manos a un paciente que hace unos años resultó con graves lesiones en medio de un accidente de tránsito.

Se trata de Joe DiMeo, un hombre de 22 años que fue sometido a la delicada cirugía, de 23 horas de duración, en el Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York.

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El paciente fue seleccionado para esta arriesgada intervención luego de que en 2018, mientras manejaba su vehículo, se quedó dormido en medio de la Ruta 22 en Nueva Jersey. Esto provocó que perdiera el control de su automóvil, chocando fuertemente contra la acera de la vía.

La velocidad y el impacto provocaron que el automóvil se volcara tras el choque y se generara un estallido que impidió que el conductor escapara de las llamas.

Dimeo fue rescatado con vida por parte de transeúntes y autoridades que llegaron al lugar del siniestro; sin embargo, sufrió graves quemaduras en cerca del 80% de su cuerpo.

Las quemaduras, además de dejar delicadas y evidentes cicatrices en cara y cuello, le cerraron casi en la totalidad los párpados y le amputaron gran parte de los dedos de ambas manos.

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Tras analizar su situación, el hombre quedó en manos de un equipo de 96 profesionales, dirigidos por el cirujano Eduardo Rodríguez, director del programa de trasplante de cara del NYU Langone, quienes realizaron el procedimiento el pasado 12 de agosto de 2020.
    
Aunque la cirugía fue todo un éxito, los especialistas decidieron no hacerlo público en ese momento ya que prefirieron esperar a que el organismo asimilara y se adaptara sin complicaciones al trasplante.

Casi seis meses después del procedimiento, el joven se encuentra muy recuperado y optimista de lograr una recuperación 100% exitosa y que le permita reactivar su vida como antes del lamentable accidente.

Por lo pronto, tanto el hombre como los médicos a cargo del procedimiento, se sienten satisfechos de esta nueva oportunidad de vida.