Desmantelan peligrosa red de tráfico de fauna silvestre
A través de WhatsApp se comercializaban los animales, muchos en vía de extinción.
Un agente encubierto se convirtió en la pieza clave para determinar el modus operandi de una peligrosa red que a través de la virtualidad, vendía especies de fauna silvestre y en vía de extinción.
En una operación articulada entre la Fiscalía y la Policía, un agente se infiltró dentro de esa organización, haciéndose pasar por traficante para poder ingresar a los grupos cerrados de Whatsapp que con peculiares nombres como Faunatic’ y ‘Exotic Colombia’, en donde se encargaban de ofrecer y vender los animales.
Le puede interesar: [Video] 'Timochenko' no pudo declarar ante la JEP porque fue hospitalizado
En dichos grupos de chat solamente podían permanecer 12 personas que se dedicaban al comercio ilegal de animales, con falsos apodos se concentraban las ventas de tigrillos, ocelotes, venados, búhos, serpientes, tortugas, guacamayas, micos, babillas y múltiples especies de la biodiversidad nacional entre las cuales la mayoría se encuentra en peligro de extinción.
De acuerdo con la sigilosa investigación del agente encubierto, conseguían hasta lagartos y réptiles exóticos.
No obstante, también traficaban con mamíferos, aves, reptiles y primates, entre otras especies.
Una vez se concretaba el ‘negocio’, se pactaba el pago a través de una transacción bancaria virtual y los animales, eran enviados por encomienda a través de transporte público no solamente en Colombia sino también al exterior.
Durante la investigación se identificaron 14 entregas efectivas entre Bogotá y Soledad (Atlántico).
Sin embargo, los animales fueron recuperados y fueron dejados a disposición de las Corporaciones Autónomas Regionales de Cundinamarca y del Atlántico.
También se descubrió que los supuestos traficantes se relacionaban con redes de cazadores de animales que se encargaban de sacar especies jóvenes de la depresión momposina, ubicada entre los departamentos de Bolívar, Cesar, Córdoba, Magdalena y Sucre.
Lea además: Procuraduría inhabilita por diez años a Aida Merlano por compra de votos
Se identificó además que los animales, tras ser ofrecidos posteriormente eran preparados para la venta y entrega. Según la Fiscalía en el caso de las aves les cortaban las alas y a los mamíferos los amordazaban y amarraban.
“Posteriormente, eran camuflados en cajas a las que les abrían huecos para permitir la respiración de las especies y con la aparente connivencia de algunos transportadores, los enviaban entre buses de servicio público. La mayoría de las entregas se hacían en Barranquilla y Soledad (Atlántico), Bogotá, Cali, Medellín y Cartagena”, señaló la Fiscalía.
En los grupos de WhatsApp, donde se comercializaban ilegalmente las especies de fauna silvestre ofrecían los tigrillos y otros mamíferos por $1’300.000, un mono tití por $900.000, una guacamaya $700.000 y una babilla en $100.000.
De acuerdo con las autoridades ambientales, el daño para algunas especies es irreparable porque fueron cazadas a temprana edad y no podrán sobrevivir en su hábitat natural, por lo que quedaron afectadas de por vida.
El agente encubierto logró obtener pruebas suficientes para demostrar no solo la existencia de dicha organización sino además, de cómo operaba interiormente.
Grabaciones de las conversaciones y videos permitieron la identificación de los supuestos traficantes que fueron capturados entre Bogotá y Cartagena, respectivamente.
Durante las audiencias concentradas, una Fiscal adscrita a la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos les imputó los delitos de: aprovechamiento ilícito de los recursos naturales y daño de los recursos naturales.
Ante el material probatorio tres de los investigados aceptaron los cargos, ellos fueron identificados como Rafael Cruz Romero, conocido como ‘Ojitos’ o ‘Emmanuel’, Sebastián Bastos Peñaranda alias ‘Sebas’ o ‘Andrés’, Alfonso Mauricio Triana alias ‘Miguel’ y Jeisson Humberto Triana conocido como ‘Ángela’.