¿Líder Ana María Cortés tenía algún vínculo con el Clan del Golfo?
El ministro del Interior, Guillermo Rivera, descartó esa hipótesis de momento y llamó a los colombianos a la unidad.
Luego de que el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, confirmara que Ana María Cortés, líder social asesinada en Cáceres (Antioquia) es investigada por presuntos vínculos con la banda delincuencial del Clan del Golfo, el ministro del Interior, Guillermo Rivera, dijo que de momento se maneja el conducto y primera hipótesis del caso, antes de entrar a hacer otras conjeturas.
"Cuando se conoce sobre el homicidio de una persona que tiene activismo político social o liderazgo, esa es la primera hipótesis de investigación, que el asesinato pudo incurrir por cuenta de ese liderazgo (...) se está buscando saber si este crimen obedeció a ese liderazgo", explicó Rivera, descartando de momento vínculo alguno de la señora Ana María Cortés con el Clan del Golfo.
Por otra parte, manifestó que no existe un patrón nacional sobre las causas que llevan a que se den los asesinatos de líderes sociales, pues en diferentes regiones del país los ataques se dan por diversas razones.
"Nosotros nos allanamos a las cifras que verifica Naciones Unidas. En los últimos 10 años son 211 crímenes contra líderes sociales, cuyo origen es diverso. En algunas zonas obedece a organizaciones delincuenciales con relación a los cultivos ilícitos, la minería ilegal, como en el Uraba antioqueño o el Bajo Atrato (...) -por ejemplo- los crímenes contra líderes reclamantes, su origen tiene que ver con testaferros. No hay un patrón nacional, existen patrones por regiones", explicó el ministro del Interior.
El dato: el ministro Rivera asegura que la tasa de homicidios de 2017 "es la más baja de los últimos 40 años, entonces la paz ha tenido dividendos".
En otro aspecto, Rivera aceptó que hacen falta más esfuerzos para combatir los crímenes contra líderes sociales. "La seguridad no es solamente en las ciudades, hay muchos departamentos en el país donde hoy hay seguridad, como el Huila o Putumayo. La gente nos dice que las cosas han cambiado substancialmente. Hay otras zonas en donde claramente hay dificultades, como en el Uraba antioqueño, eso no lo desconocemos", manifestó.
Entretanto, dijo que la protección de la UNP está ahí pero, de alguna manera, no es suficiente. "La UNP protege actualmente en promedio a unas 5.000 personas que no son servidores públicos (...) las medidas de protección individual siempre van a ser insuficientes (...) se creó un modelo de protección colectiva (...) no es suficiente lo que estamos haciendo. En la medida en que se registren asesinatos de líderes sociales hay que hacer muchos más, en eso estamos, esto es algo que nos duele mucho".
Un dato más: el ministro del Interior manifiesta que "la tasa de esclarecimiento de estos crímenes de líderes sociales supera el 50 por ciento, cuando en el pasado esto era el reino de la impunidad".
Rivera también fue enfático en decir que, aunque no se descartan otras hipótesis sobre el asesinato de Ana María Cortés, no comparte que, como dicen algunos sectores, se esté reviviendo en las regiones el fenómeno del paramilitarismo.
"La primera hipótesis es que ese crimen ocurrió por cuenta del liderazgo, eso es lo primero que se descarta (...) si el liderazgo fue la causa, lo diremos, si es lo contrario, también", dijo Rivera.
"Para nosotros el paramilitarismo ya no existe como en los noventas, existen es estructuras del crimen organizado que tienen una forma de actuar distinta a los paramilitares", agregó.
Con todo lo anterior, hizo un llamado a la ciudadanía: "Desde hace mucho tiempo venimos haciendo un llamado a que cese la polarización en el país (...) incendiar el país, generar odios y controversias no conviene (...) deberíamos estar unidos apoyando a las instituciones para que las investigaciones avancen rápidamente", manifestó.
Y aceptó el esfuerzo insuficiente del Gobierno Nacional frente a este flagelo: "el Gobierno ha demostrado una preocupación por este fenómeno, nos ha faltado, pero en estas situaciones es donde los colombianos deberían estar unidos (...) a nosotros nos corresponde proteger a los líderes, y claramente no los hemos protegido suficientemente", concluyó.
Guillermo Rivera: el paramilitarismo ya no existe como en los noventas