Llega a Cuba Barack Obama para histórica visita (señal en vivo)
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llegó este domingo a Cuba, donde cursará hasta el día 22 una histórica visita para sellar el proceso de acercamiento con la isla.
El Air Force One, el avión presidencial estadounidense donde Obama viajó acompañado de su esposa Michelle, sus hijas Malia y Sasha y su suegra Marian Robinson, aterrizó en el Aeropuerto Internacional de La Habana sobre las 16.20 hora local (20.20 GMT).
Recibió al mandatario el canciller cubano, Bruno Rodríguez, acompañado de la directora para América del Norte del Ministerio de Exteriores, Josefina Vidal; el embajador de Cuba en EE.UU., José Ramón Cabañas, y el encargado de negocios de la Embajada de Estados Unidos en la isla, Jeffrey DeLaurentis.
La lluvia acompañó la llegada de Obama y su familia a la isla, por lo que tuvieron que bajar las escalerillas del avión con paraguas negros.
El canciller cubano obsequió a la primera dama un ramo de rosas blancas, además de otro de rosas rosadas a las hijas del presidente, y uno de rosas rojas para la suegra del mandatario.
Tras aterrizar en la capital cubana, el presidente Obama dedicará su primera tarde a visitar La Habana Vieja, previsiblemente junto a su familia.
En la Catedral, ubicada en el casco histórico de la ciudad, los Obama serán recibidos por el cardenal Jaime Ortega.
La agenda oficial de Obama comenzará mañana lunes, en una jornada en la que el presidente de Estados Unidos se reunirá con su homólogo cubano, Raúl Castro, en el Palacio de la Revolución de la capital cubana, tras una ceremonia de recibimiento.
Está previsto que al término de su reunión, Obama y Raúl Castro hagan una declaración a los medios.
Después Obama participará en un encuentro con empresarios estadounidenses y "cuentapropistas", como se conoce en la isla a los emprendedores que han emergido con la controlada apertura a la iniciativa privada puesta en marcha por Raúl Castro como parte de las reformas económicas de la isla.
El martes 22, último día de la visita de Obama, el presidente de Estados Unidos ofrecerá una conferencia dirigida al pueblo cubano en el Gran Teatro de La Habana, que será retransmitida en vivo por la televisión oficial de la isla.
Ese mismo día tendrá también un encuentro con representantes de la sociedad civil independiente, incluidos representantes de la disidencia interna.
Obama y su familia se despedirán de Cuba en la tarde del martes tras asistir a un simbólico partido de béisbol en el Estadio Latinoamericano de La Habana entre una selección local y el Tampa Bay Rays de Florida (EE.UU.).
Obama es el primer presidente de Estados Unidos que visita Cuba en casi 90 años y el único que lo ha hecho desde el triunfo de la revolución castrista en 1959.
Siga aquí la transmisión en vivo:
Dipsomanía y diplomacia
La fascinación de los cubanos por Estados Unidos fue totalmente recíproca de parte de los estadounidenses que buscaron diversión durante la visita de Coolidge. Smith describió que los funcionarios y periodistas, libres de la férrea Ley Seca, hicieron un tour por los bares de La Habana. "Un buen grupo de nosotros salimos de fiesta", escribió.
Sin embargo, durante una recepción oficial, Coolidge desplegó "una obra maestra de acción evasiva" con los tragos que le ofrecía un camarero. Actualmente, con el relajamiento del embargo económico que realiza Obama y el aumento de visitantes norteamericanos a la isla, La Habana está ganando rápidamente reputación de ser una ciudad fiestera.
En bares como "El Floridita", uno de los mas antiguos y reputados de La Habana, los "daiquiris" fluyen veloces por el mostrador para bebedores en su mayoría extranjeros. William Arias, un camarero de 52 años, dijo que era "muy posible" que la delegación de Coolidge haya estado allí, pues "en aquel tiempo los americanos que iban a beber, venían a este bar", al que acostumbraba visitar el escritor estadounidense Ernest Hemingway. Los planes de Obama para beber en Cuba, serían aprobados por el estricto Coolidge. "Con suerte, voy a tener tiempo para disfrutar una taza de café cubano", escribió Obama a Ileana Yarza, una cubana de 76 años, en una misiva enviada esta semana en el vuelo inaugural que restableció el servicio postal entre los dos países después de cuatro décadas.
Pero la historia podría repetirse si la delegación estadounidense quisiera abastecerse de ron cubano. La ley estadounidense todavía restringe a 100 dólares el alcohol o el tabaco que los viajeros puedan ingresar desde Cuba. Una cantidad insuficiente que apenas da para una caja de 25 puros, pero alcanza para varias botellas de ron de siete dólares la unidad. El problema, señala una columna de consejos de este mes del diario The Washington Post, es que los límites de peso de las aerolíneas pueden forzar a la difícil decisión de "elegir entre el ron y la ropa”. Este dilema no afectó a los norteamericanos en 1928, pues discretamente se les dijo que podían llevar bebida desde Cuba, pese a la prohibición vigente en Estado Unidos.
Smith quería llevar seis botellas de medio galón de Bacardí, pero no cabían en su maleta, dejando al periodista ante la disyuntiva que el Post describe actualmente ¿Qué decidió?. "Descarté la mayor parte de la ropa" dijo un decidido Smith.