Rusia responde a acusaciones sobre derribo vuelo de Malaysia Airlines
Rusia es acusada de "participar" en el derribo del vuelo MH17, tras confirmarse que el misil utilizado era de una unidad militar rusa.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, rechazó hoy las acusaciones formuladas por Holanda y Australia sobre la implicación de Rusia en el derribo en julio de 2014 del vuelo MH17 de Malaysia Airlines sobre el territorio del este de Ucrania.
"Ayer conversé con mi colega holandés (Stef Blok). Me comunicó lo que ya es sabido. Le pedí pruebas que confirmen estas afirmaciones. Él no me presentó ninguna prueba", dijo Lavrov a la prensa, en el marco del Foro Económico Internacional de San Petersburgo.
El Gobierno holandés y australiano responsabilizaron formalmente a Rusia de "participar" en el derribo del vuelo MH17, tras confirmarse este jueves que el misil utilizado pertenecía a una unidad militar rusa.
La alta representante para la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, pidió a Rusia que asuma su responsabilidad en el derribo del avión de Malaysia Airlines en el este de Ucrania en 2014.
"La Unión Europea hace un llamamiento a la Federación de Rusia para que acepte su responsabilidad y coopere plenamente", indicó la jefa de la diplomacia europea en un comunicado.
Mogherini, que hoy se reunió en Bruselas con el primer ministro ucraniano, Volodymyr Groysman, mostró su "total apoyo" a la resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que exige rendir cuentas a los responsables del derribo del vuelo malasio del 17 de julio de 2014, tragedia en la que murieron las 298 personas que iban a bordo.
Las declaraciones de la alta representante de la UE para la Política Exterior se producen después de que ayer el equipo conjunto de investigación a cargo de las pesquisas del vuelo MH17 llegaran a la conclusión de que "la instalación de BUK utilizada para derribar el vuelo MH17 pertenecía sin lugar a dudas a las fuerzas armadas de la Federación de Rusia".
Según los investigadores, el sistema de misiles aéreos que derribó el avión pertenecía a una unidad militar rusa, que lo trasladó desde Kursk (Rusia) hasta Donetsk (Ucrania) un mes antes del ataque al avión que despegó en Ámsterdam con rumbo a Kuala Lampur.